Advertencia para aquel lector desprevenido, queride
internauta pédide, no es que no me importe la lengua española, no es que no lea
tampoco. Por qué le aseguro que leo y bastante. Pero soy disléxica.
Si,
disléxica como Papelucho (por si conoce el personaje) [Si no lo ha hecho, se ha
perdido de un buen libro de literatura infanto-juvenil, además bastante
divertido según mis recuerdos]. Vuelvo al tema…muchas veces puede que pase,
esto que acaba de pasar. Es decir, que el ( ) sea más central y/o largo que la
idea principal. Además de una que otra falta de ortografía, ausencia o exceso
de acentos (tildes). Tengo tendencia a comerme ciertas letras o palabras
enteras según mi concentración, dar vuelta las letras. Y no crea que no me leo
antes de entregar o publicar algo, por qué de verdad que lo hago, pero no lo
veo. Así de simple.
Esta condición según la
psicología y la psycopedagogía es una enfermedad que puede ser más o menos
invalidante. Yo intento tomarmelo con humor. Pero confieso que he pasado más de
alguna vergüenza.
Para agregarle condimento a la
anécdota además de ser disléxica hace ya varios años me fui a vivir al
extranjero. Más precisamente a Quesolandia (más conocido por todes como La
France). Ahí aprendí este delicioso idioma con muchos de sus matices y mi
computador también. Lo que da como resultado un pc y una dueña políglota y
disléxicos. La máquina trata de corregir lo que estima incorrecto, lo cuál no
siempre es pertinente. Me agradan los neologismos también, los encuentro
cachilupi (te dejé loco querido Word).
Es por esta razón queride
internauta ponga de su parte, para que siga el hilo conductor de lo que puede
encontrar en estas columnas. De antemano muchas gracias por su compreensión.
PS : Igual yo trataré de
poner todo de mi parte para que lo que lea, si lo lée sea inteligible. Pero
lamentablemente, no le puedo prometer nada.
No comments:
Post a Comment